La histotria de Meryl.

Escuchar “ Jóvenes eternamente” de Pol 3.14 quizás no era la mejor manera de matar el aburrimiento. La tarareaba mientras unas inmensas ganas de llorar se apoderaban totalmente de su cuerpo. Había algunas frases que llegaban directas clavándose en el corazón de Meryl. Pero no se pondría a leer hasta después de comer. Todavía quedaban unos 20 minutos aproximadamente.

Así era su vida, nada en especial en ella, subidas y bajadas constantes en su estado de ánimo, cuestas que caían en picado una y otra vez, pero por lo general, su vida era bastante normal. Aunque estaba segura de que ella de normal no tenía nada.

Ahora que reparaba en la hora ,se daba cuenta de que era la misma en la que ayer había llegado a casa en la mañana. Había ido con Estrella, Ángela ,Valeria y Camila a las librerías del pueblo para ir comprando los materiales que le harían falta para el curso. Temblaba nada mas pensarlo, dentro de tan poco estaría dentro del nuevo infierno y una vez allí, no podría salir.

Lo fundamental es que esta subió a dejar los materiales en su piso mientras sus amigas la esperaban en la entrada de su patio. Lo extraño fue que había tres hombres parados en frente de su puerta hablando con su padre. Meryl supuso que querrían hacer propaganda de cualquiera que fuera su producto. El que no paraba de hablar sin descanso con su padre, que no ayudaba al silencio, era mayor, de estatura baja y llevaba un traje de color negro. Detrás de él se encontraban dos muchachos.  Uno tenía el pelo de color castaño claro, era alto, esbelto y al igual que el hombre mayor, llevaba un traje impecable, aunque no hacía falta decir, que le quedaba muchísimo mejor, se podría suponer sin exagerar, que tenía un bonito cuerpo. A su lado, y apoyado en la pared, con un gesto evidente en su cara de querer salir de allí, se encontraba el otro ,este, tenía el cabello oscuro, casi negro, y al igual que su compañero, dentro de ese traje podría relucir un cuerpo esbelto y definido..bastante sexy. Pero había algo en ese chico que la desconcertaba..sus ojos..eran de un color gris espectacular, sin embargo, se veían fríos..sin sentimiento alguno, sin brillo, sin nada. Parecía que detrás de ese chico, al que no le echaría muchos más años que ella, se escondía un pasado verdaderamente oscuro.

Pasó al lado de ellos para entrar en su casa. Pero además de su padre que la saludo con la mirada y del hombre mayor que paro de hablar solo unos dos segundos para examinarla. Los dos muchachos ni siquiera repararon en que había pasado una persona a su lado. Como si de un fantasma se tratará. Pocos minutos después de dejar las cosas salio y se reencontró con sus amigas. Irían a un bar a comer algo.

-Meryl no nos habías dicho que dos tíos así te habían ido a raptar-bromeó Estrella.

-Es verdad. Ni siquiera nos lo has presentado-Seguía diciendo Camila.

-Meryl rió. Ojalá hubieran venido por mí.

-Las demás amigas rieron y todas se fueron tranquilamente a pasar un buen rato.

 Sin embargo, Meryl se preguntaba porque su mente se empeñaba en recordar a aquel extraño chico de ojos grises, al que posiblemente no vería más en su vida.